El Centro de Estudios quiere poner en valor la Azucarera

Noticia publicada el día 18/07/2012 en el diario La Comarca

La apuesta incondicional por la cultura del Centro de Estudios del Bajo Martín se sitúa como el pilar básico de esta institución comarcal sin ánimo de lucro. Para continuar con la socialización de la cultura, en la última reunión se acordó la organización de las primeras jornadas sobre patrimonio de toda la Comarca y un Festival de Cines de Aragón.

Del 23 al 24 de noviembre tendrán lugar estas jornadas que reunirán el encanto de los monumentos y la riqueza cultural del conjunto de municipios que componen la Comarca.

El objetivo es «poner en valor el patrimonio de la región», según palabras del presidente del Centro de Estudios, Román Sierra.

En ese mes adquirirá un papel importante la Azucarera del Bajo Aragón, de la Puebla de Híjar, que cumplirá el centenario de su fundación. «Fue el motor económico de toda la zona durante 50 años», comentó Sierra respecto a esta reliquia.

La destrucción parcial de la sinagoga de Híjar, y otras pérdidas en los edificios históricos de la Comarca sin su posterior rehabilitación provocan que la institución luche por su protección.

A partir de aquí surgió el interés por realizar este evento. «No hay que verlo como un impedimento, sino como el motor de la sociedad», recalcó Román Sierra. Según el presidente del Centro, la Cultura local ayuda a «promocionar los territorios».

Por otra parte, Sierra explicó que es posible que se lleve a cabo un Festival de Cine de Aragón. En este acto se pretende reunir a todos los festivales de la Comunidad.

Una sociedad con historia

En una época en que la crisis está afectando sobre todo a la rama de la investigación, el Centro del Bajo Martín continúa la socialización de la cultura y su potenciación en la Comarca.

Nació en 1998 como Centro de Estudios Hijaranos con la finalidad de conservar y mostrar la tradición cultural. Entre sus proyectos, publicaron Rujiar, cuaderno anual de miscelánea. Además, desde hace un año, se encuentran inmersos en habilitar una sala de exposiciones. En ésta se realizó la primera fase, de albañilería, y falta la segunda.